Paulo Coelho dijo en su libro “El Alquimista” que cuando uno desea algo con todo su corazón, el universo conspira para hacerlo realidad. Esta es la mejor manera de describir un fin de semana mágico, algo que anhelaba con todo mi ser.
Este sueño comenzó hace casi un año cuando decidí que mi carrera en el mundo corporativo había llegado a su fin y me aventuré a emprender. Debo confesar que dar este salto fue difícil y generó más incertidumbre de la que esperaba inicialmente. Sin embargo, siempre tuve la convicción de hacer algo diferente, algo significativo, y construir mi visión basada en mi deseo de tener un impacto y contribuir.
En enero de este año, iniciamos formalmente el proyecto y se unió a nosotros nuestra primera colaboradora, Marcela Muñóz, quien creyó firmemente en la misión de la Revolución de la Riqueza. Ella ha sido el pilar más importante de este movimiento que busca crear libertad a través de la riqueza.
Comenzamos a construir nuestra visión y nuestro plan, y finalmente en marzo realizamos el lanzamiento oficial en un evento muy especial en BIVA, con grandes amigos y mentores de la talla de María Ariza, Jorge Combe, Claudia Zaragoza y Pablo Sánchez, llamado Revolución 360.
En ese evento anunciamos dos grandes iniciativas:
- La experiencia inmersiva de riqueza 360, llamada Wealth Mastery.
- La plataforma de inversión “Revolution Capital”.
Nos pusimos manos a la obra para diseñar un evento que revolucionara la forma en que se comprenden las finanzas y la riqueza, desde una perspectiva más humana y orientada al servicio de la vida. Decidimos que debía ser una experiencia holística en la que, además de compartir enseñanzas, técnicas y herramientas para generar riqueza financiera, también abordáramos temas de bienestar y desarrollo personal.
Con casi 20 años de experiencia en finanzas y un camino significativo en el desarrollo personal, creé el “framework RDLR”, a través del cual he descifrado los secretos de la riqueza financiera y personal, conjunto que ahora llamamos “riqueza 360“.
Este framework consta de 5 pasos:
- Visión.
- El juego del dinero.
- Realidad financiera.
- Estrategia.
- Acción.
A través de este proceso, determinamos el propósito de vida de cada persona y, a partir de ahí, construimos un plan financiero y personal para lograr esa gran visión y propósito.
Creemos firmemente en el impacto que este proyecto puede tener en la vida de las personas y en su capacidad transformadora. Por eso elegimos un lugar excepcional, un hotel boutique en un paraíso natural. Diseñamos cada momento para que durante tres días los asistentes tuvieran una experiencia única y convocamos a los mejores para este taller.
Se unieron grandes líderes y mentores, personas cercanas que me han enseñado mucho y que se han convertido en grandes amigos. Personas como Pablo Sánchez, Juan Pablo Zuluaga, Oso Trava, Clau Zaragoza, Juan Pablo Álvarez, Santiago Saldivar, Maite Valverde, Óscar Austria, entre muchos otros…
También asistieron expertos financieros, inversionistas, abogados, y fiscalistas, y toda nuestra red de contactos financieros para proporcionar a los asistentes todas las herramientas necesarias para comenzar a pensar y actuar como los grandes inversionistas, y para invertir como lo hacen los grandes patrimonios.
Finalmente, teníamos el concepto completo y nació el Wealth Mastery.
Lo anunciamos al mundo y la convocatoria superó todas nuestras expectativas. Más de 500 personas se postularon para el programa. Desafortunadamente, solo teníamos espacio para 50 personas, por lo que tuvimos que seleccionar a aquellos que consideramos que tenían el mayor potencial para aprovechar esta experiencia. Realizamos la difícil tarea de selección, los invitamos a formar parte de esta primera generación, y la respuesta fue muy emocionante para nosotros, ya que el mensaje que queríamos compartir resonaba en cada una de las personas que fueron invitadas.
El día llegó el viernes 23 de junio de 2023. Vinieron personas de toda la República Mexicana y un par de personas de Colombia. Tuve el honor de compartir esto con grandes amigos y, sobre todo, con mi familia más cercana. Los asistentes llegaron, a quienes había entrevistado brevemente, y sin saberlo, estaba conociendo a personas que transformarían mi vida ese mismo fin de semana.
Tuvimos tres días intensos de trabajo, conferencias, experiencias inmersivas, grandes conversaciones, risas, mucha emoción e incluso magia. Vi de primera mano la transformación de las personas que nos acompañaron, desde el miedoque a menudo provoca el tema de las finanzas, hasta la certeza de saber qué camino tomar. De la incertidumbre de llegar a un lugar con desconocidos, a la conexión de salir con nuevos amigos y formar una gran comunidad. Tuve la experiencia del poder que tenemos como seres humanos cuando nos unimos por una misma causa. Presencié la magia que ocurre cuando un grupo de personas genuinamente desea crecer y, a través de su crecimiento, ayudar a los demás.
Fue un fin de semana mágico, esa es la única manera de describirlo. Fue el comienzo de algo muy grande, un sueño que siempre he tenido, pero que va mucho más allá. Un movimiento que transformará la realidad de las personas que tengan el coraje de seguir este camino.
Me quedé profundamente conmovido por la calidad de las personas que se unieron a la comunidad. Tengo la certeza de que esta primera generación tendrá un gran impacto en sus propias vidas. Serán los pioneros de un movimiento de conciencia, información y generosidad.
Sin saberlo, yo fui quien recibió el regalo más grande. Fue un fin de semana que nunca olvidaré, algo que se guardará en lo más profundo de mi corazón para siempre, porque ahora sé que estoy cumpliendo mi misión en este mundo.
Agradezco infinitamente a todos los que confiaron en nosotros, y recuerden que ahora es nuestra responsabilidad dar este regalo que hemos aprendido a quienes nos rodean.
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